¿Quién no ha querido alguna vez retroceder en el tiempo? ¿Te has reprochado haber tomado tal o cual camino? ¿Arrepentido de alguna “mala” decisión? Para solucionar esto debes esperar a que alguien descubra cómo viajar en el tiempo, pero voy a intentar quitarte las ganas de ello para que te dejes de “pamplinas” (ver nota 1) y mires hacia delante, ya que tengo una teoría al respecto.
Es muy sencilla, se basa simplemente en que si yo pudiera retroceder a un determinado momento pasado de mi vida, no lo haría con los conocimientos o la información que tengo ahora mismo, sino que simplemente retrocedería y volvería a estar igual que entonces, por lo que obviamente tomaría el mismo camino, y mi vida seguiría siendo la misma, con lo que acabaría escribiendo estas líneas en este preciso momento.
Si una persona pudiera retroceder en el tiempo y cambiar en algo el transcurso de su vida, el mundo estaría en serio peligro. Por ejemplo, ¿quién en su sano juicio no se atrevería a realizar una pequeña apuesta inocente? El mundo acabaría lleno de nuevos y afortunados dictadores millonarios, bancarrota general, a tomar por c… (resumiendo mucho el proceso, evidentemente)
Claro que esta sólo es una idea, pero no es la única teoría.
Hace unas semanas estaba cenando con unos amigos y salió el tema de poder enmendar errores pasados. Yo expuse mi teoría, pero no convenció mucho. Evidentemente salió a relucir la archiconocida trilogía de Regreso al Futuro (que levante el pié el que no sepa de la existencia de estas películas). El protagonista viaja en el tiempo 30 años atrás e interfiere en las vidas de sus padres, interfiere en ellas evitando que se enamoren, por lo que nunca se casarán y ni mucho menos tendrán hijos. Consecuencia directa: nuestro protagonista está a punto de desaparecer de la tierra de una forma muy absurda. Esta teoría deja demasiados interrogantes abiertos… si el protagonista desaparece, nunca llegó a viajar en el tiempo, por lo que nunca pudo separar a sus padres. Es la pescadilla que se muerde la cola.
En fin, aunque es seguro que se puede debatir este tema durante horas, lo mejor que puedes hacer es mirar hacia delante y aprender de errores pasados, porque lo hecho, hecho está.
(1) pamplinas, tonterías o como se las quiera llamar: cada individuo tiene sus problemas y les da la importancia que quiere o puede. Seguramente, visto desde fuera, los asuntos que más nos preocupan, aquellos que no nos dejan dormir, son minucias para otros. Por supuesto que, para la persona que los sufre, sus problemas son los suyos y son los que tiene que tratar de resolver, independientemente de la gravedad subjetiva y objetiva de los mismos.
Si el protagonista no nace y se "borra" todo lo que hizo para separar a sus padres, no los separaría nunca y seguiría naciendo. ¿entonces no serviría de nada viajar en el tiempo?
Bueno, yo creo que, aunque no nazca, lo que hizo antes del momento de separar a sus padres no desaparecería porque es lo necesario para no nacer.
Es un lío, pero si alguna vez viajo en el tiempo no tocaré nada.
saludos
Hay otra película llamada "La máquina del tiempo" que aporta otro punto de vista bastante interesante. Se desarrolla a finales del siglo XIX y nada más empezar muere la prometida del protagonista y éste se obsesiona y pretende cambiar el pasado. Inventa la máquina (más bien acaba de inventarla, ya que lleva con esta idea desde hace muchos años y había hecho grandes progresos), retrocede y evita que ella muera de la forma que lo hizo (creo recordar que iban a un parque y allí un atracador la disparó, por lo que el protagonista cambia la cita y no van a ese parque), pero resulta que al final muere, aunque de diferente forma. Vuelve atrás en el tiempo una y otra vez evitando todas esas situaciones, pero ella siempre acaba falleciendo de modo diferente, hasta que se da por vencido y se da cuenta de que es cosa del destino y no puede evitarlo. Luego ya el tío decide viajar al futuro, pasa por el 2030, no le gusta mucho, y decide viajar más adelante, se da un golpe, pierde el conocimiento y aparece en el año ochocientos mil y pico, y aquí la película se transforma totalmente y desvaría una barbaridad.
Si nuestro futuro está o no predestinado hagamos lo que hagamos sería otro tema de debate, pero igualmente no llegaríamos a ninguna conclusión que satisfaga a todo el mundo. Personalmente me inclino más por la teoría del Doctor Emmet Brown en "Regreso al futuro": El destino no está escrito, depende de uno mismo.
Gracias por la visita y el comentario, por cierto.