Relato de aquel fin de semana de hace años ha, escrito por Son of a Plumber, en el que los amigos burgaleses devolvieron por fin la visita a los forofos de Cáceres.
Viernes, 19 de marzo de 2010.
Han pasado los días, los últimos se han vuelto interminables esperando a tan distinguida visita pero por fin ha llegado el día en el que se espera arrive a Cáceres la tropa burgalesa comandada por «ése peaso de fistro duodenal llamado djfruco«. Esta tarde será el partido LEB, antes el encuentro con fruco y cía, mañana la pachanga y, en definitiva, por delante un fin de semana que se presenta apasionante así que aprovecho para quedarme en la cama hasta tarde porque el fin de semana se presenta movido y uno ya no es lo que era, sniff, sniff, vuelta y vuelta en la cama y Morfeo se apodera de mí, coño que mariquita me estoy volviendo.
Son las 12 del mediodía, si «a quien madruga Dios le ayuda», supongo que será mejor no esperar amparo divino de ningún tipo. He logrado descansar, es que anoche me costó conciliar el sueño porque quedé en presentar a Javier Ortiz y a fruco durante el descanso del partido de hoy, jodo, vaya momentazo, qué responsabilidad, espero que no me de un ataque de pánico ante estos dos pesos pesados. Coño, estoy nervioso, doy por hecho que fruco, sus amigos y el resto de pachangueros que llegaran a Cáceres serán un encanto y la duda de si lograré estar a la altura de lo bien que me hicieron sentir ellos en Burgos recorre mi cuerpo así que se hace obligada una visita al cuarto de baño, estos putos nervios siempre se me agarran al estómago. Comida en casa con el «Gran Patriarca Familiar», que es el Día del Padre, el caso es que recibí una oferta para compartir mesa y mantel con wruk, Magic Stick y Made In Burgos vía mail pero acabé rehusándola ante la amenaza de ser desheredado de tierras, dineros y demás posesiones que el cabeza de familia lanzó contra mí en caso de no asistencia a la comilona familiar.
Recibo un sms de fruco que me anuncia su llegada a Cáceres y poco después les llamo para que me informen de su situación e intenciones, me cuenta que han dado una vuelta por las calles de la ciudad, que van a comer por la Plaza y que alucinan con la temperatura que tenemos y con el hecho de poder comer en una terracita al aire libre… qué cosas tienen estos burgaleses . Quedo con él en su Hotel a las 19 horas, el famoso «Low Cost» al que ciertos foreros apodan como el «Hotel de la Muerte», qué cabrones , y que luego resulta estar bastante bien, me alegro. Sigo con la comida, los nervios vuelven y guarreo más que como el segundo plato ante la desaprobación familiar: «no comes nada hijo, si es que estás delgadísimo, este muchacho…»
Las manecillas del reloj, sí coño, el mío es analógico, avanzan a toda máquina hacia las 17 horas y no sé muy bien cómo matar el tiempo. Como supongo que la tarde y el resto del finde tendrán cierto componente friki decido ir poniéndome en situación escuchando mis discos suecos de Gyllene Tider…el «Juni, Juli, Augusti» me está poniendo ya en situación y el Gå & fiska! me hace delirar así que decido dar por zanjada la sesión de música sueca y, después de escribir alguna sandez en el foro, decido acicalarme para ir al encuentro de fruco. Limpito y aseadito salgo en busca del coche y ¡joder!, que le dí un lavado por fuera ayer, tampoco mucho, la verdad, pero con las cuatro gotas que han caído está hecho una caca, van a pensar que soy un puerco así que, por lo menos, decido ordenar un poco el coche y tirar cierta mierdecilla que tiendo a acumular en él, sí, padezco el «síndrome de Diógenes» sobre las cuatro ruedas. Cojo el «buga» y tiro para el Low Cost, me entretuve demasiado ordenando el coche y van a pensar que, además, de ser un cerdo con mi utilitario, soy un tardón, esto último lo reconozco.
Allí llego sobre las 19:10 y ya me están esperando en la puerta, salgo del coche, fruco viene hacia mí, yo hacia él…coño un abrazo, qué chulo, a lo «Brokeback Mountain». Saludo a su encantadora señora y a la estupenda pareja de amigos que nos acompañarían durante todo el fin de semana. Nos repartimos en los coches para hacerles de sherpa hasta el pabellón, fruco conmigo, fruco conmigo, yuhuuuu . Así que primera charla en el coche camino del Multiusos, una delicia. Aparcamos en la misma puerta del pabellón, las 19:30 y ya estoy allí, palabra que en mi vida nunca había llegado tan pronto a un partido. Me preguntan por algún sitio donde poder tomar algo pero antes les pido un minuto para poder ir sacando la entrada y no esperar colas después. Me dirijo a la taquilla y allí doy mi número de socio y carné…para mi sorpresa el número de carné coincide con el de una tal Hortensia , ¿cómo es posible?…pronto me avisan de que, en mi caraja mental habitual, he traído el carné (que se dice así, que lo he visto en la RAE, que esto de internet es la leche) de la temporada anterior (los tengo todos juntitos), ostras, qué vergüenza, cómo les digo yo ahora a fruco y sus acompañantes que les tengo que dejar para volver a por el carné…de esta temporada, vaya ridículo… menos mal que el amable caballero de taquilla me echa una mano y entre eso y que llamo a casa para preguntar qué número tiene mi carné, puedo sacar la entrada después de identificarme pertinentemente…¡prueba superada!, muchas gracias señor taquillero, muy amable .
Nos vamos a Casa Diego y nos sentamos en la terraza, vuelven a flipar con el hecho de poder tomarse algo a plena calle, charlamos animadamente un rato y me suge la duda, fruco, ¿todos tus amigos son tan jodidamente encantadores? Llamo a Will para ver qué planes tienen con el resto del sector de Burgos y en un par de minutos se presentan él y Wruk para compartir refrigerios en la apacible tarde cacereña mientras nos cuentan que las última noticas de la Patrulla H sitúan a sus integrantes en Salamanca a la hora de comer , estos capaz de quedarse a disfrutar de la noche salmantina en vez de venir al partido, miedo me dan. Wruk comienza a explicarles qué ver en Cáceres, Will y yo nos miramos, este hombre es una enciclopedia con patas y allí nos ilustra con nociones de historia y monumentos de Cáceres. Los amigos de fruco nos cuentan que lo que más les ha impactado de Cáceres es que a la hora de guiarles en la ciudad y de darles referencias, en vez de nombrar a la estatua de Hernán Cortés todo el mundo les indica «El Caballo», sí, aquí el jinete importa poco, de hecho si la estatua del Cid estuviera en Cáceres el protagonista sería Babieca y no el tipo ése espada en ristre que va a lomos de él, seguro, de hecho a la estatua del pobre Moctezuma aquí la conocemos como la del «indio«…y que yo sepa no es socio del atleti.
Llega la hora de ir al partido y entramos en el pabellón. Saludo a la estupenda pareja Magic y Made, a Conete y a Alberto, etc, etc… where’s is Gasolution?, haciendo fotos, dejemos que curre el profesional que ya habrá tiempo de saludarle como merece. Rapto a fruco y me siento con él a ver el partido, aunque muy cerquita de su mujer y amigos y de muchos de los burgaleses que han venido a animar a su equipo, me siento como un infiltrado… y, también, muy cómodo.
El partido arranca con Burgos poniendo distancia de por medio y parece que esto no marcha para los de casa con un 19-28 para Burgos que pone de manifiesto su superioridad en el juego durante el primer cuarto. Fruco y yo, bla, bla, bla… acerca del pabellón, acerca del tema Francis, de la gente que hay viendo el partido, de los árbitros que ya empiezan a hacer de las suyas y, mientras, Cáceres que recorta distancias y consigue irse ganando al descanso, parece que hay partido, seguimos con el play-off en mente.
Llega el momento de las presentaciones , qué nervios, qué nervios, y nos vamos a la zona de prensa a buscar a Javier, le divisamos al fondo con camisa blanca y revisando algún papel, siempre que le veo va con papeles o con algún cuadernillo, nos ve, se acerca y compruebo que tienen un parecido físico asombroso del que hasta el propio Javier se percata, locurón. Charlamos un rato y veo por allí a Paco Mangut, mi frikismo supino hace retumbar en mi cabeza un «pídele a Javier que os lo presente, pídeselo, vamos leches, que se lo pidas» pero la vergüenza que me da parecer un mitómano sin control ante la que fue voz de las hazañas del Cáceres C.B. me lo impide. Nos despedimos de Javier, muchas gracias por tu simpatía crack, y nos dirigimos de vuelta a la grada pero ahora nos vamos al otro lado del pabellón para ver la segunda parte con algunos de los foreros cacereños. Empieza el show, el pobre fruco aguanta estoico y educado la sinfonía que Cherry ejecutaba en el Multiusos y la consiguiente victoria local. No pasa nada, nos dice, nunca una victoria me supo tan mal, hasta casi le pido disculpas… espero que Burgos tenga mucha mejor suerte en lo que resta de temporada y pueda dar un buen golpe en el play-off porque os lo merecéis, tú te lo mereces… anda, que mira que si nos encontramos en los play-off…¿más pachangas?.
Esperamos la salida de los jugadores de Burgos, fruco y cía saludan a alguno de ellos, tratan de animarles y compruebo que este tipo es imposible que le caiga mal a nadie, un auténtico fenómeno. Mientras charlan ellos con los jugadores le cuento a emocionado a mi novia, recién llegada después de una nueva tarde de plantón por motivos baloncestíticos, cómo fue el encuentro entre Javier Ortiz y fruco y, ella, me mira con una cara de decir «tal vez si salgo corriendo no pueda alcanzarme y nunca más tendré que saber de este tío tan raro» .
Nos vamos, de nuevo, para Casa Diego al encuentro de foreros burgaleses y cacereños para degustar raciones varias y echarnos unas risas, me toca al lado de Dohko, un tipo estupendo, todo exquisito, como de costumbre . Tras reponer fuezas nos dispersamos, algunos a descansar mientras que la Patrulla H planeaba una primera incursión en el territorio nocturno cacereño que, me consta, duró hasta altas horas de la noche, estos chavales… unos auténticos atletas, llego a salir con ellos y no hubiera podido ni con las botas en la pachanga y ellos corre que te corre. Antes de conducir al cuarteto burgalés de vuelta al hotel fruco y Sra me agasajan con una bonita cesta, exquisitamente preparada, que contiene un par de quesos de la tierra y algunas morcillas, se me cae la baba, mil gracias por tan bonito detalle.
Otra vez fruco en mi coche, otra vez, toma, toma…, me despido y me voy, abrazado a mi cesta, a casa con la sana intención de dormir pero el hecho de no haber jugado ni a las chapas durante estos tres últimos meses me acojona de cara a la pachanga del día siguiente, me resigno y asumo que sea otra noche en la que me cueste conciliar el sueño .
Sábado, 20 de marzo.
Siete horas, siete malditas horas de descanso no son suficientes para que un atleta pueda rendir en una pachanga como la que tengo esta misma tarde , intento hacer el vuelta y vuelta del día anterior para ver si consigo enroscarme un poquito más pero nada, decido levantarme y prepararme un buen café para despejarme del que doy cuenta mientras voy viendo las estadísticas en feb.es y me cercioro de que estamos octavos, seguimos ahí pero necesitamos rematar fuera de casa algún partido, lástima de Mallorca el otro día. Decido no molestar a fruco por la mañana, ya le daré la brasa al pobre durante la tarde y la noche, para que pueda ver con tranquilidad Cáceres acompañado de su mujer y amigos. Ejerzo de novio, tratando de compensar el plantón de la tarde anterior, y me voy con «la jefa» a tomar algo por la plaza y a dar una vueltecilla por la Ciudad Monumental, buuuf, las cinco de la tarde y bien pasadas, que tengo pachanga, me voy a la carrera en dirección a casa…hasta luego Luuuucaas .
Preparo las cosas, nervios, nervios, más nervios mientras temo por la integridad de los tableros del V Centenario ante la avalancha de piedras en la que puede convertirse mi selección de tiro, mochila lista y a tumbarme como un perro en la cama media horita antes de partir al V Centenario, casi me quedo frito así que «cafetazo» que me espabile un poco aunque me temo, que ni por esas . Quedo con fruco para llevarle hasta el pabellón… qué bien, su amigo se ha apuntado a la pachanga y su mujer y su amiga van a hacer de «oficiales pachangueras de mesa» y llevarán acta, tiempo y…¡¡¡GRABACIÓN!!! del partido, el nivel de frikismo al que estamos llegando acabará con un internamiento colectivo en algún centro mental…por cierto, que tenga pista de básket para que podamos jugar pachangas, jo,jo . Mientras aparco el coche veo que Will está poniendo algo en la puerta del pabellón, me fijo, y tooooma, tooooma, un cartel anunciando la pachanga, lo dicho, todos la psiquiátrico, ¡turutururututuuutuuruuuu!
¡Vamos a jugar en la pista central!, en la que jugaba el Cáceres C.B. en sus tiempos de ACB, qué honor y qué sacrilegio al mismo tiempo . Fotillos de rigor con la horrible colcha que se trajo conete del hotel, qué juego dio la puñetera colcha. Comienza la pachanga, empiezo a tirar, comienzo a fallar, aquí mis huevos, sigo tirando, sigo fallando, mucha carrera y mucha voluntad pero ni una canasta en la primera mitad, sencillamente lamentable. El partido se decanta, demasiado pronto, de nuestro lado, quizá en futuras ediciones sea más conveniente hacer equipillos mixtos para que todo tenga un poquito más de emoción. A pesar de todo buenos ratos y algún sopapo que otro, uy, qué daño, menos mal que no me llevé ninguno que con mis molestias en la espalda ya voy apañado, que estoy para que me desmonten y me vendan a piezas .
Comienza la segunda parte, Dios existe, veo aro, me entran algunas canastas a lo «Taggart», evidentemente cualquier parecido con la realidad es pura coincidencia pero como soy el que cuento la historia… el gato es mío y me… eso, eso. Fruco y su amigo protagonizan un bonito alley-up y fruco, tras fintar y hacerme saltar como un condenado remonta con potencia línea de fondo y clava una precisa suspensión. Wrukanovic sigue gritando desde la banda, después saldría para arrasar aro y zona burgalés, qué ansia, menos mal que esta vez no me toca sufrirle. Acaba el partido con una nueva victoria local, la verdad, lo que menos importa, atrás un ratillo de basket estupendo con la inestimable colaboración de un par de improvisados árbitros, mil gracias, y de las guapas chicas de la mesa, santa paciencia. Fotos de rigor, que hay que ilustrar el foro y a vueltas con la supercolcha. A recoger rápido que hay que irse a casa, ducharse y salir pitando para La Parrilla de Galarza que una estupenda cena nos espera.
Llego a Galarza, tarde para variar, pero no soy el último porque la Patrulla H deambula por las calles de Cáceres intentando dar con el sitio y eso que era en línea recta…no digo más que yo en Burgos me perdí dos veces y eso que, también, era en línea recta… los cojones. Ale, a la mesa que empieza el banquete acompañados para la ocasión con Rakso y su inseparable gorra. ¿Carne o pescado?, me decido por pescado, sin chistes que os crujo. Al final, con lo bueno que estaba el pescado la carne tiene una pinta estupenda, si lo llego a saber…en cualquier caso, tremendo menú el que nos escogió Will y a un precio 10, muchas gracias, ñam, ñam .
Acabada la cena, dirección Plaza Mayor y a ver dónde vamos. La Patrulla H busca diversión pura y dura, otros deciden rebajar la cena con un buen paseo y mi novia y yo acompañamos a «los cuatro fantásticos», (lo de fantásticos en todos los sentidos) al Corral de las Cigüeñas. Alguna copilla y animada conversación con algún famosillo por el Corral…por cierto, lo lea quien lo lea, el actor de turno llegó al Corral porque nosotros le guiamos, toma ya , aunque no tenga ni pajolera idea de quién era.
Nos echan del Corral, hasta nos cambian los vasos de cristal por unos de plástico…¡a la puñetera calle! . En la misma Plaza de Santa María, vemos a Naymick, ostias, se me hace el culo pepsicola , asalto en plena calle a mi negro albino favorito y el pelirrojo, con tremenda amabilidad atiende mi solicitud de fotografiarse con fruco, su amigo y el menda…nos despedimos del pelirrojo y jodida suerte la nuestra, cuando reparamos la foto había salido tan oscura que lo mismo podemos decir que es con Naymick como con Don Pimpón, sólo se ven cuatro sombras…una el doble de grande que las otras tres pero sombras, noooooooooooo…tendré que asaltar al pobre Naymick otro día .
Despedida en el párking de mis cuatro burgaleses favoritos, gracias a todos pero especialmente a ustedes cuatro por los estupendos ratos compartidos y promesa de devolver visita a Burgos, con o sin básket de por medio, que me han dicho que cuando en verano aquí estamos con la lengua fuera, por allí se duerme arropadito y todo, qué lujo. Tu señora un encanto, ha sido un placer volver a saludarla, y tus amigos una pareja estupenda de la que me quedo gran recuerdo, espero veros de nuevo a vosotros también (no digo nombres que tu amiga amenazó con venir y ajustarme cuentas desde Burgos, aunque si eso quiere decir que viene otra vez hasta estoy por arriesgarme ). A tí, fruco, un fuerte abrazo, simplemente un genérico gracias porque me sería imposible agradecerte todas las cosas una a una y en deuda de tu visita por estas tierras de las que, espero, hayas podido marchar contento.
Domingo, 21 de marzo.
Dormí como un tronco, del tirón y como un campeón, a las 13 horas me caigo de la cama, más por el qué dirán que por otra cosa y puesto en contacto con fruco me dice que va por Salamanca, buen viaje amigo, espero lleguéis bien, igual que el resto del grupo burgalés.
Decido llamar a Will para ver si sigue vivo después de una noche con la Patrulla H, qué buen título para una película, después de que Zhamber decidiera poner pies en polvorosa ante la que se avecinaba . Me cuenta que sí, que la Patrulla también va de vuelta y que lo pasaron bien, ya me quedo más tranquilo.
Fin de semana magnífico y un par de días para el recuerdo, así que muchas gracias a todos / as los que hicieron posible este fin de semana (a la gente de Burgos por pegarse el viaje y a la gente de Cáceres por planificar tantas cosas y con tanto tino). Como bien comentamos fruco y yo en el Corral, parece mentira todo lo bueno que ha podido salir del foro y lo bueno que es todo, impensable cuando nos pusimos a intercambiar privados hace algunos años cuando el bueno de Tony Smith las metía de todos los colores por Burgos y nosotros pasábamos nuestra travesía por el desierto sin baloncesto que llevarnos a la boca…impensable acabar dando con tanta y tan buena gente en el foro y, también, fuera de él. Muchas gracias a todas aquellas «estrellas invitadas» del fin de semana: al amable señor de la taquilla, a Javier Ortiz, a los árbitros de la pachanga, a Drew Naymick, a la paciente novia…gracias.
A todos vosotros, muchas gracias, y hasta pronto, ¿play-off?, ¿Final Four?…hasta el infinito y más allá .
P.D. Fruco, a la hora de definir el fin de semana, sólo puedo decir «qué barbaridad» . Si me dejo a alguien, gracias a ti también, seguro que este par de días no hubiera sido lo mismo sin tí. Como bien dice fruco, iron y Juanes estuvieron en nuestro pensamiento y fue una lástima no contar con vosotros. Olvidé presentarte a Kmc10m, cuando iba a hacerlo te pusiste a hablar con alguien y no quise molestar, después se me olvidó pero ya dí a fruco señales de quién era el que le daba duro al bombo. Paquillo, espero que pasaras un estupendo día en el aniversario de tus padres, la próxima contamos contigo.